El camión cuba, fundamental para un servicio de desatascos
Llevar a cabo un servicio de desatasco no es tarea sencilla. Son muchos los materiales que hay que utilizar y tiene que ser gente muy profesional la que se encargue de ello. Dentro de todos los elementos utilizados, hay uno que es de vital importancia: el camión cuba. Este vehículo se encargará de desatascar con agua a presión fosas sépticas o tuberías que estén taponadas.
Los camiones cuba tienen una gran capacidad y se encuentran divididos en dos compartimentos: uno destinado al agua limpia y el otro destinado a aguas negras con suciedad. La capacidad de estos vehículos puede llegar a ser de 15.000 litros, una auténtica salvajada, aunque el rango típico va desde los 1.000 hasta los mencionados 15.000. Dependiendo los pedidos de los clientes y el trabajo que toque hacer, se llenará con más o con menos agua.
¿Cómo funciona un camión cuba?
Lo primero que hay que tener claro es que para un desatasco simple es ridículo utilizar un gran camión cuba, ya que con uno de pequeño tamaño será suficiente. También es importante conocer que la división de los compartimentos no siempre es como se ha mencionado en el párrafo anterior, pudiendo ser modificada dependiendo de las necesidades de cada trabajo.
Dicho esto, hay que resaltar que, básicamente, el camión cuba se encargará de eliminar obstrucciones en tuberías, pozos o fosas sépticas a través de la presión del agua, pero su funcionamiento es bastante complejo.
Los camiones cuba están capacitados para subir el líquido, llegando a muchos metros de profundidad. Esto se conseguirá mediante aspiración a través de un flujo que es capaz de mover grandes cantidades de agua sucia e impulsar agua a presión a través de una bomba que transporta el agua líquida limpia. Es importante mencionar, también, que la limpieza del alcantarillado en muchas ocasiones se hace a través de estos vehículos.